La IMPLEMENTACIÓN del DERECHO a la CONSULTA PREVIA en PERÚ
las comunidades como pueblos indígenas. (Contestación del procurador
público de la Presidencia del Consejo de Ministros del 19 de octubre del
2009 a la demanda recaída en el expediente 00022-2009-AI.)
Creo que el hombre del futuro, sobre todo en el Perú, será siempre mestizo
y tendrá de todas las razas. Lo importante, por supuesto, es que haya
preservación cultural, que una cultura no avasalle a la otra. Eso sí […]
Somos un país que ha hecho del mestizaje su concepto sustantivo […]
que aunque no se haya practicado mucho en la historia del Perú, es una
esencia fundamental de la peruanidad. (Mauricio Mulder Bedoya. Segunda
Legislatura Ordinaria 2009, Comisión de Constitución y Reglamento.
Transcripción del debate del 13 de julio del 2010 sobre la aprobación de
la Ley de Consulta.)
Ya lo decía Raúl Porras repitiendo a José de la Riva Agüero, el Perú es
un país de sincretismo y de síntesis, y hasta los puros blancos, decía Riva
Agüero con cierta pedantería, tienen una voluntad de mestizaje. (Javier
Valle Riestra González Olaechea. Segunda Legislatura Ordinaria 2009,
Comisión de Constitución y Reglamento. Transcripción del debate del 13
de julio del 2010 sobre la aprobación de la Ley de Consulta.)
56
El llamado paradigma del mestizaje, según Degregori, esconde un proyecto de
dominación que pretende la integración nacional o aculturación de los pueblos
indígenas u originarios, resumida en «te doy derechos si te vuelves como yo».
Dicho paradigma tuvo como herramientas centrales la escolarización masiva en
castellano y el servicio militar obligatorio (Degregori 2004).
Durante la década de 1930, diversos políticos peruanos, entre los que se destacan
Deustua y García Calderón, encontraron en el mestizaje la salida para dejar atrás
la «falencia natural» de la «raza» indígena de nuestro país. Degregori (2004)
refiere una cita del filósofo y pedagogo Alejandro Deustua, quien al debatir
sobre la inversión de dinero en la educación indígena señaló que «el Perú debe
su desgracia a esa raza indígena que en su disolución psíquica no ha podido
transmitir al mestizaje las virtudes de las razas en períodos de progreso [...] El
indio no es ni puede ser sino una máquina» (Manrique 2011: 201).
La segunda forma en la que se evidencia este discurso está referida a que solo los
indígenas que hayan mantenido a través del tiempo sus características originales
serían sujetos de los derechos específicos. Como una expresión de ello, tenemos
la creencia de que el cambio de vestimenta o el uso de tecnologías modernas
descartarían la condición de indígena y, por tanto, su derecho a la consulta
previa. El discurso en cuestión encuentra además correlato en muchas de las citas
de distintos líderes de opinión, como podemos ver en las siguientes:
El varayoc que usan los alcaldes indígenas no es preínca, sino de la reforma
del virrey Toledo. No podemos ser hippies californianos que llegan de paso,