24
ANM-RG-0272-16 del 11 de febrero de 2016 con respecto a las solicitudes
mineras vigentes en jurisdicción de los mismos municipios y el polígono
que delimita el Resguardo. Por otra parte, la Agencia presentó los Reportes
Escritos ANM-RT-095-16 y ANM-RT-095-16 del 12 de febrero de 2016,
en los cuales se dan detalles sobre los títulos mineros y los contratos de
concesión vigentes en las áreas señaladas.
Por otra parte, anexó los Certificados Mineros de los Contratos de Concesión
Mineros inscritos en el Registro Minero, haciendo la respectiva relación de los
títulos. Finalmente, informó que la Gerencia de Catastro y Registro Minero,
mediante comunicación interna, corrió traslado al INCODER del oficio ANM20145510495672 del 5 de diciembre de 2014, “para que como encargado de la
cobertura oficial de Resguardos Indígenas en Colombia realizara los trámites a su
cargo [sin embargo] a la fecha del último reporte actualizado de la Cobertura de
12 de febrero de 2016, el Catastro Minero Colombiano NO reporta aún la
información sobre la delimitación de estos territorios, como quiera que dicha
información no ha sido suministrada por el INCODER”.
2. La Defensoría del Pueblo, mediante escrito radicado el 18 de febrero
de 2016, informó que de acuerdo con la información que reposa en el
Sistema de Alertas Tempranas (SAT) en el mes de noviembre de 2014, se
registró y sistematizó información referente a la situación de riesgo del
Pueblo Embera Chamí de Caldas de los resguardos Nuestra Señora
Candelaria de la Montaña, Cañamomo y Lomaprieta, San Lorenzo,
Escopetera Pirza y las parcialidades de Cauromá y La Trina. Según la
Defensoría, “se identificó entre otros elementos que potenciaron el
conflicto armado en dicha subregión, el auge minero y los diversos
intereses confluyentes en torno a la actividad extractiva como aspectos que
vienen impactando las formas de vida de las comunidades indígenas que
allí habitan”.
En ese sentido, de acuerdo con la entidad, las dinámicas territoriales relacionadas
con las explotación aurífera pueden explicarse en dos líneas: “i) la intensificación
de la actividad minera relacionada por la afluencia de personas foráneas y
mineros provenientes de localidades aledañas, la cual impacta la economía de
subsistencia ligada a la minería artesanal y a la extracción de maderas que
ancestralmente han sido practicadas por las comunidades asentadas en los
resguardos y territorios indígenas de la zona, problemáticas que impactan
principalmente a los resguardos Cañamomo – Lomaprieta y Nuestra Señora
Candelaria de la Montaña; ii) la importancia estratégica de la subregión del Alto
Occidente de Caldas para la implementación de distintos megaproyectos
planificados para la zona y se relaciona, entre otros, con la concesión de títulos
mineros sobre el resguardo Cañamomo y Lomaprieta a la Sociedad Kedahda S.A.
(filial de la Anglo Gold Ashanti en Colombia). Este último elemento de análisis
se expone (…) como otra de las variables que marcan el desarrollo de una nueva
fase de confrontación armada”.